La JMAS Chihuahua reparó más de 90 fugas en la colonia Chihuahua 2000, beneficiando a 400 vecinos y recuperando miles de litros de agua.
Chihuahua, Chih. (ADN/Staff) – La Junta Municipal de Agua y Saneamiento (JMAS) de Chihuahua ha implementado el programa “Chihuahua Sin Fugas”, una iniciativa que busca enfrentar la problemática del desperdicio de agua potable en la capital del estado.
Recientemente, este programa se llevó a cabo en la colonia Chihuahua 2000, donde se realizaron reparaciones en más de 90 fugas de agua, beneficiando directamente a más de 400 residentes de la zona.
Estas acciones son parte de un esfuerzo más amplio para abordar la crisis hídrica que afecta a diversas regiones de México, y en particular a las localidades del norte del país, donde el recurso es cada vez más escaso.
Este programa no solo se centra en la reparación de fugas, sino que también toma en cuenta la atención y gestión de solicitudes de los vecinos. Durante la jornada en Chihuahua 2000, se respondieron más de 50 gestiones, que fueron canalizadas a las áreas correspondientes, permitiendo así un seguimiento específico sobre los apoyos requeridos.
Esta interacción directa entre la JMAS y la comunidad es un aspecto fundamental en la gestión del agua, dado que propicia una comunicación más efectiva e involucra a los ciudadanos en la solución de problemas que afectan su cotidianidad.
El director ejecutivo de JMAS, Alan Falomir, ha enfatizado que la recuperación de miles de litros de agua derivados de estas microfugas es un hito significativo.
La pérdida de agua potable no solo implica una cuestión de infraestructura, sino que también refleja hábitos de consumo y el nivel de conciencia ambiental de la población.
De acuerdo con datos del Instituto Nacional de Estadística y Geografía (INEGI), en Chihuahua, el consumo promedio de agua por persona es menor que el de otras zonas del país, lo que sugiere la necesidad urgente de conservar y utilizar este recurso de manera más eficiente.
La intervención de la JMAS en colonias como Chihuahua 2000 también es un reflejo de un contexto político complejo, donde las autoridades municipales deben equilibrar la infraestructura hídrica con las demandas de una población en crecimiento.
En este sentido, los programas de atención a fugas son una estrategia de corto plazo que, si bien no resuelven de manera definitiva los problemas de abastecimiento, son un paso hacia la creación de una cultura del cuidado del agua.
Esta situación se presenta en un escenario donde el cambio climático y la sequía recurrente presionan aún más los recursos hídricos locales.
Es importante señalar que la gestión del agua en Chihuahua tiene una larga trayectoria que se ha visto marcada por tensiones entre el crecimiento urbano y la disponibilidad del recurso. Desde la década de los ochentas, el estado ha enfrentado desafíos significativos en la administración de sus fuentes hídricas.
La implementación de programas como “Chihuahua Sin Fugas” señala un cambio en la política pública hacia enfoques sostenibles y participativos, donde la comunidad juega un rol activo, no sólo como beneficiaria, sino también como aliada en la conservación del agua.
La JMAS ha hecho un llamado a los usuarios para que estén atentos a las redes sociales, donde se publicarán los recorridos programados por las colonias en las próximas semanas.
Esta invitación es clave para fomentar la participación ciudadana y la concientización sobre la importancia de cuidar el agua potable.
A medida que el estado de Chihuahua continúa lidiando con los retos derivados del cambio climático y las presiones demográficas, iniciativas de este tipo pueden ser fundamentales para cultivar una mayor responsabilidad en el uso del agua, asegurando un futuro más sostenible para todos los chihuahuenses.

¿Quieres compartir información o enviar boletines de prensa?
Envíanos un correo.
¿Tienes dudas? ¿Necesitas verificar alguna noticia?
No dudes en enviarnos un correo, con gusto la verificamos por tí.
Síguenos en nuestras redes sociales.