La explosión estalló durante las oraciones del viernes, generalmente a la que asistían grandes multitudes. Las imágenes y videos compartidos en las redes sociales mostraban una escena sangrienta dentro de la mezquita, con cuerpos y partes del cuerpo esparcidos y fieles que intentaban rescatar a los heridos.

Un portavoz de los talibanes, Bilal Karimi, confirmó a la VOA que el ataque con bomba en Kandahar “mató e hirió a varios compatriotas”. Dijo que se está llevando a cabo una investigación sobre la violencia “para identificar a los culpables y llevarlos ante la justicia”.

Nadie se ha atribuido la responsabilidad del ataque.

La explosión se produjo una semana después de que un ataque de oración del viernes en otra ciudad afgana, Kunduz, dejara más de 50 muertos. Ese ataque fue reivindicado por la provincia de Khorasan del Estado Islámico, la rama local del grupo Estado Islámico. ISKP había afirmado que un uigur llevó a cabo el ataque de Kunduz.

En una entrevista con VOA a principios de esta semana, el viceministro de Información de los talibanes, Zabihulah Mujahid, negó que el Estado Islámico fuera una amenaza grave, a pesar de múltiples ataques, incluido uno contra una reunión para los últimos rituales de la propia madre de Mujahid en Kabul.

Dijo que la única razón por la que ISKP había logrado llevar a cabo ataques en las últimas semanas era que los talibanes abrieron muchas cárceles cuando se apoderaron del país, permitiendo que los facilitadores de ISKP escaparan.

“Nuestras fuerzas están tratando de encontrar sus raíces. En la última semana y media hemos arrestado a varias personas pertenecientes al EI y hemos destruido varias de sus casas seguras. Hemos neutralizado varios de sus ataques ”, dijo Mujahid.

ISKP afirmó que un uigur había llevado a cabo el ataque de Kunduz, pero Mujahid dijo que China no había discutido el tema con los talibanes.

Este es el cuarto ataque de alto perfil que IS Khorasan ha llevado a cabo desde el 15 de agosto, el día en que los talibanes entraron en Kabul.

El grupo también se atribuyó la responsabilidad del ataque mortal contra el aeropuerto de Kabul mientras se evacuaba a miles de afganos que huían de los talibanes. Ese ataque mató a casi 100 afganos y 13 militares estadounidenses.

Ayaz Gul de VOA contribuyó a este informe.