En una entrevista con la Voz de América el martes, Hasina Jalal, quien vive en Washington, explicó que su padre Faizullah Jalal, un destacado crítico de los talibanes, le aseguró que estaba bien cuando hablaron por teléfono tras su liberación en Kabul.

Los militantes islámicos habían arrestado al profesor universitario el sábado en su casa y lo trasladaron a una cárcel de inteligencia.

La detención de Jalal desató indignación de los afganos en las redes sociales y llamamientos para su liberación de grupos internacionales de derechos humanos, diplomáticos de Alemania y la Unión Europea, y del presidente del Comité de Asuntos Exteriores de la Cámara de Representantes de EE. UU., Gregory Meeks.

Hasina Jalal dijo que un grupo de cinco a 10 amigos de su padre, entre ellos sus compañeros profesores en la Universidad de Kabul, visitaron también la cárcel de inteligencia el martes para demandar su liberación.

“Les dijeron a los talibanes que los encarcelaran con él, porque no se iban a ir. Y por supuesto, los talibanes estaban al tanto de todo el revuelo internacional, así que yo creo que eso los presionó”.

Agregó que “los talibanes pensaron que si lo detenían por más tiempo, su caso iba a traer más atención internacional y más personas elevarían sus voces”.

Faizullah Jalal relató a la emisora hermana de la VOA Radio Azadi, de RFE/RL, después de su liberación el martes que lo trataron bien cuando estuvo detenido.

Sin embargo, dijo que los militantes lo “alentaron” a “reflejar las realidades” de la sociedad afgana en sus comentarios políticos.

También señaló que un talibán le explicó que esas realidades incluían el respeto a la percepción islamista más limitada de la libertad de expresión, diferente de las interpretación de Occidente.

El profesor, sin embargo, prometió seguir “diciendo la verdad”.

Jalal, quien ha sido un abierto crítico de los talibanes por décadas, generó un gran discusión en las redes sociales después de participar en un acalorado debate televisado el 20 de noviembre con el portavoz del Gobierno talibán, Mohammad Naeem. En un momento, el profesor llamó a Naeem “ternero”, un insulto en Afganistán que implica estupidez.

Otro portavoz, Zabihullah Mujahid, dijo por Twitter que el profesor había sido detenido por hacer comentarios “sin sentido” e incitar a las personas contra el Gobierno en las redes sociales, e ilustró su publicación con tomas de pantalla de cuatro tuits supuestamente enviados por Jalal.

Los familiares de Jalal dijeron que los tuits eran de una cuenta falsa en Twitter que ya fue reportada y eliminada por la compañía. Agregaron que Jalal no usa una cuenta de Twitter y otras partes han estado publicando a su nombre desde noviembre.

Hasina Jalal dijo a la VOA que su padre les mostró a los hombres que lo detuvieron que él no tenía una aplicación de Twitter en su teléfono.

En opinión de la hija, la detención “demuestra a todo el mundo que los talibanes son intolerantes”.

[Con información de Michael Lipin, VOA, y Rooshan Noorzai, VOA]