Movil - LB1 -
    Publicidad - LB1 -
    abril 23, 2024 | 14:34

    Cuando los automóviles invadieron Ciudad Juárez

    Publicado el

    Publicidad - LB2 -

    La primera vez que un automóvil cruzó la frontera para internarse a las calles de Ciudad Juárez, México era gobernado todavía por Porfirio Díaz y Chihuahua por el grupo político que encabezaba Luis Terrazas. Desde ese momento, los vehículos motrices fueron invadiendo la antigua Villa Paso del Norte.

    Se trataba de autos adquiridos por las familias pudientes o tripulados por comerciantes que venían a hacer negocios o turistas, entre los que se encontraban soldados provenientes de Estados Unidos que visitaban los centros nocturnos de Juárez o acudían al lujoso hipódromo, inaugurado en 1909 por la familia Terrazas.

    El ruido de los motores y de los claxonazos comenzaron a invadir la ciudad, que ya para entonces, además del transporte que brindaba el ferrocarril, contaba con calles pavimentadas y la modernidad invadía las zonas comerciales con teléfono, telégrafo, alumbrado público, hoteles, grandes almacenes, industrias, periódicos y hasta una escuela de educación superior fundada por los hermanos Escobar.

    - Publicidad - HP1

    Pronto, los autos empezaron a contarse por centenas y el Ayuntamiento se vio en la necesidad de atender el desorden vial que se generaba.

    El presidente municipal Alberto E. Delgado, alcalde de enero de 1921 a septiembre de 1922, fue quien propuso al Cabildo identificar con placas todas las unidades motrices que circulaban por la ciudad, y de paso obtener recursos para reforzar las financias municipales y realizar más obras en la ciudad.

    Los regidores aprobaron una norma para obligar a los automóviles propietarios, residentes en la frontera, a utilizar placas, que deberían de obtener en el Municipio a partir del 8 de diciembre de 1921.

    Las placas costaban a los contribuyentes 8 pesos y tenían una vigencia de un año. En aquellos días un automóvil tenía un costo promedio de mil 200 pesos, mientras que el tranvía cobraba a sus usuarios dos centavos.

    La primera edición fue de 1900 matrículas impresas en cuadros de hojalata que fueron mandados a hacer en Estados Unidos, cuyo uso sería obligatorio a partir del primero de enero de 1922.

    La demanda de placas fue tal que de un año a otro se tuvieron que emitir 4 mil placas que equivalían al número de vehículos automotores que poseían los habitantes de Ciudad Juárez, sin contar aquellos que solamente visitaban la frontera y en los que las autoridades vieron también vio una oportunidad de obtener más ingresos, al decidir aumentar a 30 centavos la cuota que pagaban por cruzar, de ida y vuelta, el Puente Internacional de la avenida Juárez.

    El auge del automóvil en Ciudad Juárez creció después de que Estados Unidos promulgó la Ley Volstead, conocida más popularmente como ‘Ley Seca’, que provocó el cierre de negocios que expedían alcohol y su migración a la frontera mexicana.

    En esos años, los paseños cruzaban sedientos a Ciudad Juárez y escapaban a la Ley Seca, lo que representó oportunidades para los juarenses, que en esa época enfrentaban dificultades económicas generadas por la destrucción que generó la Revolución Mexicana.

    Los restauranteros estadounidenses siguieron el ejemplo de los bares y también se mudaron a territorio mexicano tan sólo para ofrecer a su clientela comidas con cerveza, vino o champaña, que de la noche a la mañana eran un lujo en Estados Unidos.

    La vocación al turismo fue creciendo en la ciudad y con ello la llegada de más automóviles.

    El cine Alcázar abre sus puertas en 1921 y ese mismo año se organiza el carnaval de Juárez. El Ayuntamiento, presidido por Alberto E. Delgado, autorizó la instalación de los casinos Tívoli Garden y el Keno, y al poco tiempo aparecerían El Palenque, Green Lantern y el Central Café, etc.

    Pronto el aparato administrativo del gobierno municipal también se vio obligado a crecer y fue creado el puesto de Oficial Mayor de la Presidencia, que recayó en René F. Grisanti.

    Debido a las robustas finanzas que tenía el Municipio, el Ayuntamiento autorizó una reducción de un 20 por ciento en los impuestos, pero creó una contribución sobre las pianolas y pianos automáticos de los comercios locales, que en ese entonces tenían estos instrumentos como única alternativa para ofrecer música a sus clientes.

    En este periodo, las calles recién pavimentadas fueron rebautizadas: Al callejón ubicado entre Ferrocarril e Internacional se le llamó Justo Sierra. A la calle entre La Paz y Vicente Guerrero se le llamó Corregidora, mientras que la Calle 23 fue llamada Aquiles Serdán y la Noche Triste se abre por el extremo norte hasta la calle Ugarte. La Calle 2ª del Panteón se renombró por coronel Miguel Ahumada.

    El Ayuntamiento ordena una nueva nomenclatura y numeración de la ciudad, debiendo pagar los interesados el importe de las placas.

    También adquirió una carroza fúnebre para dar servicio a la gente de escasos recursos, a quien también se le proporcionaron ataúdes gratis y se levantaron las bardas del Panteón Municipal, ubicado en la colonia Chaveña; además, se iniciaron los trabajos de conformación de la calzada 5 de febrero.

    EL PRIMER CHOFER JUARENSE

    Aunque desde principios del siglo pasado los vehículos circulaban por Ciudad Juárez, por calles aún sin pavimentar, estos eran propiedad de ciudadanos estadounidenses que cruzaban la frontera.

    Hasta mediados de 1915 fue cuando un juarense de nombre Rafael “Noño” García adquiere notoriedad con un Ford T color negro, del que las crónicas de la época dan constancia debido a que fue también el primer auto manejado por una mujer, lo que para su época llamó la atención en gran manera.

    Rafael García enseñó a manejar el vehículo a la señorita Guadalupe Flores aprovechando que la ciudad tenía calles recién pavimentadas en su zona céntrica, aunque una vez que tomó el volante, la conductora llegó hasta las colonias que carecían de asfalto.

    Un periódico de la época consignó la “osadía” de la mujer dando a conocer que se atrevió a conducir en pleno centro de la ciudad ante la expectativa de los “caballeros”, el murmullo de las “damas” y la descocada de los caballos que todavía se usaban para jalar carretas y coches de transporte.

    Pronto se le unirían dos conductoras más, Consuelo Weber, esposa del entonces cónsul alemán en Juárez Max Weber, y su hija Consuelito.

    Ese mismo año, los primeros choferes juarenses que consigna la prensa son Gonzalo Flores Acosta, propietario del bar Nueve Colorado, ubicado en la avenida Juárez, y los choferes del sitio Lobby No. 2, también ubicados en la misma vialidad, en el cruce con la calle Pino Suárez, a quienes el Departamento de Tránsito de esa época registra a nombre de Ángel Tamez, los hermanos José Arturo y Manuel Guzmán, Julián Arredondo, Emilio Ortúzar, José Madrid, José Muñoz y Próspero Castañón.

    Todos ellos fueron los pioneros del volante en la ciudad, en vehículos que, de acuerdo con periódicos de la época, corrían a una velocidad “desbocada” de 30 kilómetros por hora.

    El Ayuntamiento de Juárez mantuvo el control vehicular hasta 1966 cuando fue asumido por el Gobierno del Estado, y este a su vez hasta 1972, cuando entra el régimen de fronterización automotriz, aunque las autoridades estatales recuperaron el control total de los impuestos vehiculares en el 2010, cuando se derogan los impuestos federales y el Estado asume su cobró.

    Desde entonces, en los años más recientes Ciudad Juárez ha llegado a tener un parque vehicular de más de 600 mil unidades, incluyendo los llamados autos “chuecos”.


    FUENTE: Los Años Vividos, David Pérez López; Breve Historia de Ciudad Juárez; Martín González de la Vara; Visión Histórica de la Frontera Norte México Fotos colección Allen Morrison, El Juárez de Ayer y Biblioteca Publica de El Paso

    GALERÍA

    Juan de Dios Olivas

    Periodista en Ciudad Juárez, Chihuahua, ha realizado su trabajo periodístico por espacio de dos décadas para la Organización Editorial Mexicana (OEM), MEGA Radio, El Diario de Juárez y Periódico Norte de Cd. Juárez. Cuenta con estudios de historia por la UACJ, actualmente es colaborador de La Verdad Juárez y A Diario Network.


    Las opiniones expresadas por los columnistas en la sección Plumas, así como los comentarios de los lectores, son responsabilidad de quien los expresa y no reflejan, necesariamente, la opinión de esta casa editorial.

    Publicidad - LB3 -

    HOY EN ADN TV

    - Publicidad - (MR1)

    Historias Recientes

    Toma Protesta Martín Chaparro a Nuevos Encargados de Despacho

    En una sesión extraordinaria de cabildo, el alcalde Martín Chaparro Payán toma protesta a los nuevos encargados de despacho de Ciudad Juárez. ¡Compromiso y continuidad administrativa durante el proceso electoral! #GobiernoJuárez #Elecciones2024

    Apoya Canaco Juárez Iniciativa del Fondo de Pensiones para el Bienestar de AMLO

    Elizabeth Villalobos de Canaco Juárez apoya la reforma del Fondo de Pensiones para el Bienestar de AMLO, destacando su potencial para mejorar las pensiones de los trabajadores. #ReformaPensiones #BeneficioLaboral #CiudadJuarez
    - Publicidad - (MR2)

    LAS PLUMAS DE ADN

    - Publicidad - (MR3)

    Más como esto