Christopher Martin testificó que a sabiendas aceptó un billete falso de $ 20 de Floyd por los cigarrillos a pesar de que el dinero se restaría de su cheque de pago de acuerdo con la política de la tienda.

El joven de 19 años dijo que después de repensar su decisión, le informó al gerente de la tienda, quien le dijo que saliera y le pidiera a Floyd que regresara a la tienda.

“Si simplemente no hubiera aceptado el billete, esto podría haberse evitado”, dijo Martin.

Haciéndose eco de los sentimientos de otros espectadores, Martin dijo que sintió “incredulidad y culpa” mientras se encontraba en la acera observando el arresto de Floyd.

Martin fue una de las personas que testificaron sobre su frustración y enojo cuando vieron a Chauvin arrodillado sobre el cuello de Floyd afuera de una tienda en mayo pasado.

Chauvin se arrodilló sobre la nuca de Floyd durante 9 minutos y 29 segundos mientras Floyd lloraba repetidamente porque no podía respirar.

Chauvin, que es blanco, fue despedido por el departamento de policía de la ciudad el día después de que Floyd, un afroamericano, muriera bajo custodia.

El oficial enfrenta cargos de asesinato y homicidio involuntario y se declaró inocente.

Los abogados defensores de Chauvin han argumentado que estaba siguiendo su formación y que otros factores, como las enfermedades cardíacas y el consumo de drogas, provocaron la muerte de Floyd.

La muerte de Floyd y un video de la escena que se compartió ampliamente en las redes sociales y los programas de noticias provocaron protestas en numerosas áreas de los Estados Unidos y otras partes del mundo contra la crueldad policial y el racismo sistémico.

La ciudad de Minneapolis acordó recientemente pagar a los familiares de Floyd $ 27 millones en daños para resolver sus reclamos de abuso en el caso.