México es el país de Latinoamérica que más exporta productos para la salud, según la Asociación Mexicana de Industrias Innovadoras de Dispositivos Médicos, AMID, México manufactura y exporta toda clase de productos médicos tales como agujas tubulares de sutura, siendo el tercer exportador a nivel mundial. Es cuarto exportador de instrumentos y aparatos de medicina, cirugía, odontología o veterinaria, así como de mobiliario para medicina, jeringas, catéteres, cánulas e instrumentos similares, y eso con datos del 2015.
Ahora, se producen en México una gran gama de productos, como catéteres, textiles estériles para salas de operación y personal médico, kits quirúrgicos, equipo para respiración, aparatos ortopédicos, instrumentos y equipo quirúrgicos y dentales, contenedores para fluido de líquidos y muchos otros instrumentos, productos y equipos médicos
Actualmente México es el principal exportador de productos médicos hacia los Estados Unidos.
Lo que sí se, es que grandes transnacionales como 3M Company, Cardinal Health, Johnson & Johnson, Medtronic, Kimberly Clark, Boston Scientific, Tyco, Becton Dickenson, Stryker Incorporated, Kendall, General Electric y muchas más tienen subsidiarias en México que manufacturan toda clase de instrumentos y productos para la salud. También hay muchas empresas mexicanas que producen para cientos de transnacionales implementos médicos bajo contrato, sumando en total 750 compañías dedicadas a ello en 9 estados del país, siendo los Estados de Baja California y Chihuahua los que tienen los mayores niveles de este tipo de manufactura.
El INEGI espera para este año, que el valor total de las exportaciones de instrumentos médicos en México alcance la suma de 15,000 millones de dólares estadounidenses.
La empresa consultora Global Insight espera un crecimiento en México del 6.4% anual de este sector industrial, que compite fuertemente en contra de Japón, Suiza, Alemania y Canadá. Estos datos fueron publicados por la empresa TECMA que es uno de los manufactureros bajo contrato más grandes que hay en México.
En adición, mencionan que debido a la imposición de contribuciones a la producción e importación de productos médicos para el sistema de salud estadounidense, los productores, en lugar de pasar el precio que esto representa al consumidor, han venido tomando decisiones de bajar al máximo los costos de producción, por lo que México por su calidad y experiencia en la manufactura de exportación de más de 50 años, se ha vuelto un país ideal para la manufactura a costos más bajos que otros países del mundo. Además, yo añado, que la guerra comercial que Estados Unidos ha desatado con China hace que las transnacionales de Estados Unidos, pongan su vista en México para la manufactura de insumos médicos.
Entiendo la urgencia que tenemos de falta de productos médicos en los hospitales públicos del sistema de salud de nuestro país, pero lo curioso del asunto, es que nuestro gobierno federal, ante la pandemia que padecemos y la escasez de toda clase de insumos médicos que sufrimos, ¿por qué se ha empeñado en comprar grandes cantidades de estos productos a China?
No sé si alguna vez Marcelo Ebrad (el mil usos del gobierno), quien es el coordinador de estos esfuerzos, se ha tomado el tiempo de preguntar a la Secretaría de Economía la cantidad de insumos médicos que se producen el país o la posible capacidad de promover cambios en los productos que en México se manufacturan.
Me pregunto si se ha obtenido alguna información de la Secretaría de Economía o del SAT respecto de la capacidad exportadora del país de este tipo de productos, ya que ellos llevan el cotidiano control de qué es lo que se produce y exporta desde México.
Por eso dejo la pregunta en el aire, ¿nuestro gobierno sabe de la existencia de esta gran industria establecida en nuestro país? Y que nos diga, ¿Por qué acudimos a China a surtirnos de lo que ya producimos aquí?
Analista político. Abogado corporativo. Fue Diputado Federal en la LXII Legislatura del Congreso de la Unión.
Las opiniones expresadas por los columnistas en la sección Plumas, así como los comentarios de los lectores, son responsabilidad de quien los expresa y no reflejan, necesariamente, la opinión de esta casa editorial.
