Alex Drueke, de 40 años, y Andy Huynh, de 27 años, desaparecieron en la región de Jharkiv, en el noreste de Ucrania, cerca de la frontera rusa el 9 de junio. Habían viajado a Ucrania cada uno por su parte y se hicieron amigos porque ambos son de Alabama.
Los estadounidenses fueron liberados junto con otros ocho ciudadanos extranjeros retenidos por Rusia o por fuerzas respaldadas por Rusia. Moscú también acordó liberar a 215 ucranianos, incluidas tres mujeres embarazadas y más de 100 combatientes del Regimiento Azov, que montó una resistencia feroz pero finalmente infructuosa en la estratégica ciudad sureña de Mariupol, dijo Andriy Yermak, uno de los principales asesores del presidente ucraniano Volodymyr Zelensky, en Telegrama.
A cambio, Ucrania liberó a Viktor Medvedchuk, un político opositor ucraniano pro-Kremlin, y a 55 combatientes rusos, dijo la oficina de Zelensky. Medvedchuk es considerado un amigo cercano del presidente ruso Vladimir Putin, quien es el padrino de la hija de Medvedchuk. Fue capturado en abril.
El gobierno ruso no reconoció de inmediato el acuerdo.
El intercambio se reveló por primera vez horas después de que el presidente ruso, Vladimir Putin, dijera que había ordenado la movilización de 300.000 reservistas militares para apuntalar las asombrosas pérdidas del Kremlin en el campo de batalla durante los últimos siete meses.
Funcionarios de la embajada de Estados Unidos en Arabia Saudita llamaron a las familias de los estadounidenses el miércoles por la mañana, dijo Dianna Shaw, la tía de Drueke. La madre de Drueke, Lois Drueke, habló con él durante unos 10 minutos y dijo que su hijo parecía estar en buenas condiciones, dijo Shaw, y señaló que se esperaba que Drueke y Huynh recibieran exámenes médicos más tarde ese día.
El secretario de Estado Antony Blinken dijo en un comunicado que Estados Unidos “aprecia que Ucrania incluya a todos los prisioneros de guerra, independientemente de su nacionalidad, en sus negociaciones, y esperamos que estos ciudadanos estadounidenses se reúnan con sus familias”. Blinken también agradeció a “nuestros socios saudíes por ayudar a encabezar esta iniciativa humanitaria”.
El gobierno saudí dijo en un comunicado que los otros prisioneros liberados eran de Gran Bretaña, Marruecos, Suecia y Croacia. Varios habían sido condenados a muerte.
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