Feligreses realizan la ‘Marcha por La Paz’, con la asistencia de cientos de participantes, culminando el evento con una homilía en ‘El Punto’ para exigir a las autoridades freno a los miles de asesinatos que se han registrado en todo el país, y en Ciudad Juárez.
Ciudad Juárez, Chih (ADN / Arturo Hernández) .– Las calles de un sector de esta ciudad fueron abarrotas por miles de católicos que llevaron a efecto La Marcha por la Paz, como reclamo a los hechos de violencia que afectan a nuestra frontera, al estado y al resto del país.
Entre los participantes se encontraron diáconos y los obispos Bishop Mark Seitz y José Guadalupe Torres Campos, de El Paso y Ciudad Juárez, respectivamente.
En peregrinación llegaron los feligreses a El Punto desde el Parque Hidalgo, con cruces y mantas con la imagen de hombres y mujeres víctimas de la violencia que afecta a nuestra nación.
“Como hombres de fe no existen fronteras, y hoy hemos sido convocados para orar por la paz; el lema da sentido a nuestra presencia aquí, (porque) Cristo nos da la paz”, expresó el obispo de Ciudad Juárez durante la homilía que se realizó en el mismo sitio en donde el 17 de febrero del 2016 el Papa Francisco llevó a efecto una misa durante su visita a nuestra localidad.
“Existe un clamor unánime en el mundo, lo mismo que en México, en el estado, y en la ciudad, (porque ya) basta de asesinatos, basta. Tenemos que ser artesanos de la paz para evitar las muertes de niños, jóvenes, adultos, mujeres, religiosas, y sacerdotes”, esto último en alusión a la violencia que alcanzó a la iglesia católica con el homicidio de dos sacerdotes jesuitas el pasado 21 de junio en la sierra tarahumara.
“Tenemos que unirnos para trabajar juntos; carguemos la cruz de nuestros hermanos y de tantos migrantes, (así como) de los que sufren, (hoy es) momento de oración y de vigilia por la paz”, agregó.
El obispo de El Paso, Bishop Mark Seitz, expresó ” En este momento hay gente que se preguntará porque están juntos los católicos en El Punto, y estamos reunidos porque tenemos un arma que tiene poder para cambiar los corazones, y para unirnos y, a través de la oración vencer esta violencia que ha dejado, miles de huérfanos y de hombres y mujeres solos”.
“Hay un camino de la vida y de la muerte, el camino de la vida va a ganar, solamente necesitamos vivir más plenamente, iniciar por nosotros, necesitamos amar más a los vulnerables, respetar la vida de los no nacidos, de nuestras familias, si hacemos esto vamos a cambiar la sociedad, no habrá lugar para los violentos”, manifestó.
La homilía se llevó a efecto después de las 19:00 horas, con la presencia de alrededor de tres mil feligreses, quienes con su asistencia se unieron a este rezo por la paz.
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