En muchas ocasiones hablar de la vejez nos parece un tema lejano, sin embargo, hoy en día, dadas las condiciones actuales de empleo, la vejez y especialmente el retiro debería ser una de las principales preocupaciones actuales sobre el futuro.
Un elemento clave para enfrentar el tema del retiro por vejez antes de que llegue el momento es tomar las medidas necesarias, lo cual contribuirá al bienestar personal y familiar del trabajador, por lo que las decisiones que se tomen en cuestión de incrementar su ahorro y cómo administrarlo determinarán la calidad de vida que tenga en el futuro.
Dados los ingresos de los trabajadores mexicanos es complicado hablar de contar con un ahorro familiar, sin embargo, sin este será imposible contar con una vejez digna con un ingreso suficiente para vivir.
Pero el tema central no sólo debe sr pensar en la vejez y una vida digna, sino el contar con las políticas y condiciones óptimas para lograr un sistema de ahorro fluido y que se ajuste a las condiciones y necesidades de los mexicanos.
Para romper la inercia de evolución del ahorro es importante generar políticas públicas que den incentivos operativos y fiscales, mismas que en México no existen.
De acuerdo con el análisis “Importancia de Diseñar Políticas Públicas para Fomentar el Ahorro” realizado por el ITAM señala que la reforma hacendaria del 2013 limitó la transformación del ahorro interno, ya que no consideró que debe existir promoción como precondición para lograr un aumento en el crédito en la economía sin generar vulnerabilidad. El aumento del ahorro interno y el desarrollo financiero son básicos para la estabilidad y el crecimiento económico.
En el caso de no adoptar medidas de promoción interna se acentuaría la vulnerabilidad que tiene el sistema mexicano por el alto ahorro proveniente del exterior y afirma que la consecuencia en caso de no tener financiamiento externo puede ser una restricción a la oferta de crédito en México. Es decir, deben existir acciones para que los mexicanos conozcan las bondades del ahorro, así como las acciones que pueden tomar para ahorrar de acuerdo a sus posibilidades económicas.
En México es difícil ahorrar con ingresos de un salario mínimo y con salarios inferiores al valor de la línea de bienestar, en este sentido, se deben incentivar a los bancos, a los ahorradores y a las empresas para que los trabajadores logren ahorrar y su dinero no pierda valor.
Lic en Economía de la UACJ y Candidata al Grado de Maestra en Ingeniería Económica por la Universidad la Salle. Columna semanal sobre temas de economía, finanzas, política y sociedad.
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