La clasificación de las culturas indígenas en el Mundo Hispánico durante los siglos XVI al XIX es bastante interesante y desafortunadamente poco difundida. Pues el proceso evangelizador no solo fue imponer el cristianismo como generalmente se maneja, fue más allá, la Corona Española a través de labor misionera consistió en comprender las culturas indígenas.
Una de las primeras barreras a las que se enfrentaron los conquistadores fue el lenguaje, ya que no se conocía un antecedente lingüístico que se le pareciera. Por lo tanto se usaron palabras y nociones de la Europa del siglo XVII para poder entender a los nativos, uno de ellos fue Nación Indio y República de Indios para poder darse una idea de la compleja conformación de los señoríos mexicas.
Este fenómeno siguió hasta el gran norte novohispano que no se terminaba de recorrer. Los pueblos apaches también fueron llamados en su momento “Indios bárbaros” haciendo la comparación de lo que se conocía de la cultura mexica más el concepto grecolatino “bárbaro” como una persona incivilizada. Aunado a eso, el hecho que los nativos norteños tenían periodos de caza, recolección y caza de ganado mayor y a veces practicaban la agricultura. Por eso fue difícil denominar si eran nómadas o sedentarios.
En ese tiempo los misioneros adjudicaron a los apaches el náhuatl en vez de su propia lengua debido a que ya se habían adentrado a la lengua mexica, la cual por su carácter imperialista era usada en Mesoamérica. Esto ayudó a que los misioneros avanzaron con la evangelización e inclusión de los apaches al sistema virreinal.
Fueron los misioneros quienes comenzaron a clasificar a los pueblos a partir de su lengua, cuya raíz es uto azteca. Una familia lingüística amerindia ampliamente difundida por lo que hoy es México, Estados Unidos y Canadá.
La clasificación que hicieron los misioneros para entender la conformación de la nación india fue la siguiente: tepehuanos, conchos, salineros y tarahumaras. Además trabajaban la sal que era muy importante porque se utilizaba para la minería y como pago de tributo para la Corona Española a través de la encomienda. Los salineros fueron un pueblo que cada cierto tiempo bajaban para trabajar en la sal, pero llegaban con productos para comerciar. Ellos tenían un gran conocimiento de la sal arenosa y también la trabajaban para curtir pieles y conservar la carne.
Durante la mitad del siglo XX se retoman los estudios sobre los apaches, primero del lado de Estados Unidos y después en México.
Desafortunadamente un problema al estudiar estas culturas, los conocimientos y metodologías no funcionaron bien, ya que los conceptos como “etnia” o “banda” son términos de la antropología moderna que hacen referencia a las hordas de bárbaros que vivían sin asentamiento, ya que los pueblos apaches estaban en constante movilidad, se usaron dichos términos, sin embargo; las fuentes primarias que dejaron los misioneros se contrapusieron a la metodología del siglo pasado. Porque ni fueron nómadas, ni sedentarios, ni bárbaros, pero tampoco crearon asentamientos. Fueron un caso único.
Por último, la cultura apache ha tenido fama de ser muy bélica, pero es importante mencionar que no todos los pueblos que conformaron la nación apache, fueron bélicos. Por ejemplo los Indios Mansos de Paso del Norte hoy Ciudad Juárez. En este caso los Tobosos fueron señalados como crueles y se les culpaba cuando las misiones eran atacadas aunque nunca tenían certeza. Su nombre fue dado porque la región en la que vivían era similar al Toboso donde vivió Dulcinea en el Quijote de la Mancha. Ellos abarcaron los actuales Estados de Chihuahua, Durango, Tamaulipas, Zacatecas, Querétaro, Veracruz y Nuevo León.
Licenciado en Historia por la Universidad Autónoma de Ciudad Juárez. Profesor en Preparatoria Lobos de la Universidad de Durango Campus Juárez y en la Escuela Preparatoria Luis Urias.
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