Ya en otras ocasiones he publicado sobre lo que autores como, Lee McIntyre, Roberto Aparicio, Gilles Lipovestki y otros, han dicho sobre lo que se conoce como la era de LA POSVERDAD.
Para algunos autores la posverdad es sencillamente mentira (falsedad) o estafa, encubiertas en una expresión que ocultaría la tradicional propaganda política o el uso de las relaciones públicas como instrumento de manipulación mediática.
Más tarde, se englobarían todos los conceptos, en una práctica recurrente.
Las fake news.
Estamos llenos de ello.
La divulgación de noticias falsas desemboca en
una banalización de la mentira y, por ende, en la
relativización de la verdad.
El valor o la credibilidad de los medios de Comunicación queda mermado frente a las opiniones personales.
Los hechos pasan a un segundo plano, mientras el “cómo” se cuenta la historia retoma importancia y le gana al
“qué”.
No se trata entonces de saber lo que ha ocurrido, se trata de escuchar, ver, leer, la versión de los hechos que concuerde más con las ideologías de cada uno.
Pero lo más novedoso hoy, es algo que momentáneamente llamaremos CONTRA FAKE.
Y no es otra cosa que enturbiar la información con aseveraciones inconcebibles, negando hechos, o sembrando la duda, con opiniones ligeras contra una información real, o indiscutible, pero por el simple hecho de cuestionar en contra una información real, o indiscutible, pero por el simple hecho de cuestionar en contra, sin sustento, se identifican como fake, y su exposición ennegrece y confunde al lector, o al escucha.
Tengo muchos casos por citar, pero sólo mencionaré un par.
El primero, irrebatible. El caso de Alejandro Moreno, “ALITO”.
Luego de ser exhibido por Layda Sansores como corrupto de alta escuela con audios que no dejan duda de sus delitos y fechorías.
Responde con un CONTRA FAKE… “¡no es verdad! ¡sí es mi voz, pero está truqueado el audio! Hay una campaña de desprestigio en mi contra”.
Nadie le cree, pero él supone que negando, se salvará de la justicia. O al menos hará creer que es un mártir.
El segundo, es mi buen amigo Jesús Salais, quien teniendo decenas de argumentos que blandir, contra sus objetivos recientes, en su proyecto de REVOCACIÓN DE MANDATO, responde con un CONTRA FAKE, a la nota reciente en la que los regidores plantean una posible multa de 27 millones por incumplimiento del contrato de recolección de basura.
“Esta multa será simulada por Cruz Pérez Cuéllar. PASA la mete y por debajo del agua, Cruz Pérez Cuéllar se las paga, es el que va a dejar firmado un contrato por 7 años más con PASA para que recolecten la basura, todo es una corrupción, ningún Director ni el Presidente Municipal quieren a Juárez. Ellos ven por sus propios intereses.
FUERA CRUZ PÉREZ CUÉLLAR REVOCACIÓN DE MANDATO.”
Líneas arriba lo expliqué: Con el CONTRA FAKE, solo se trata de enturbiar la información con aseveraciones inconcebibles, negando hechos, o sembrando la duda, con opiniones ligeras contra una información real, o indiscutible, pero por el simple hecho de cuestionar en contra, les puede traer activos.
Pero le puede restar simpatizantes también. Obvio.
El punto es, que la deformación de la realidad es lo de hoy. Llámese fake news o CONTRA FAKE.
Abogado. Analista Político. Amante de las letras.
CARTAPACIO, su sello distintivo, es un concepto de comunicación que nace en 1986 en televisión hasta expanderse a formatos como revista, programa de radio y redes sociales.
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