Tengo muchos años acompañando a estudiantes en su formación y considero que los directores de tesis somos piezas vitales en el desarrollo científico, profesional y personal de aquellos que depositan su confianza en nosotros para guiar su formación. Casi siempre somos guías académicos, ya que orientamos al estudiante en delimitar el problema de investigación, facilitamos la estructuración del marco teórico e indicamos las metodologías adecuadas.
Sin embargo, el director requiere el dominio en la disciplina y estar actualizado entendencias y debates contemporáneos asociados a la tesis que dirige. Así, paralelamentesomos transmisores de experiencia, valores éticos y habilidades para la investigación queno se adquieren en las aulas. Esta guía es fundamental para formar investigadores altamente competitivos y profesionales comprometidos con el desarrollo nacional.
Sin embargo, frecuentemente debemos apoyar en la gestión administrativa de los programas de posgrados, debemos familiarizarnos con reglamentos institucionales y apoyar a los estudiantes en trámites burocráticos que obstaculicen su avance académico. En particular, el conocimiento de los lineamientos de becas como las otorgadas por la SECIHTI, el cual es indispensable para asegurar que nuestros tesistas maximicen los apoyos disponibles.
El Reglamento de Becas de la SECIHTI indica que las becas tienen como objetivo formar capital humano de alto nivel que contribuya al desarrollo nacional. Por tal motivo, como directores de tesis tenemos la responsabilidad de garantizar que los estudiantes cumplan con los plazos establecidos para obtener el grado, requisito según el artículo 22 del Reglamento, que considera en incumplimiento a quien no obtenga el grado en los doce meses posteriores al término de la vigencia de la beca.
Una dirección de tesis responsable implica dar seguimiento sistemático del estudiante para prevenir retrasos que generen la pérdida de la beca. Además, debemos orientar la investigación hacia las “áreas o temas de atención estratégica o prioritaria para el desarrollo del país”, aspecto que el artículo 3, fracción VI del Reglamento señala como “elemento indispensable para determinar el otorgamiento de Becas y Apoyos Complementarios”.
He observado cómo una dirección deficiente se manifiesta en ausencia de reuniones regulares, retroalimentación escasa, desconocimiento del campo de estudio o falta de compromiso. Las consecuencias suelen ser la prolongación innecesaria del tiempo para obtener el grado (que según el artículo 13 del Reglamento no debería exceder los 48 meses para doctorado y 24 para maestría), la cancelación de becas por incumplimiento de compromisos académicos, investigaciones de escasa relevancia social y, finalmente, la desmotivación y deserción del estudiante.
Para que las becas otorgadas por la SECIHTI cumplan su propósito, considero esencial que los directores de tesis debemos establecer compromisos claros con nuestros tesistas desde el inicio, mantener comunicación constante y efectiva, comprometernos con nuestra propia formación continua en habilidades de mentoría, vincular los proyectos con prioridades nacionales y fomentamos la ética académica como valor.
En conclusión, he aprendido que nuestro compromiso como directores de tesis no solo beneficia al estudiante en lo individual, sino que somos un factor clave para que la inversión pública en formación de capital humano altamente especializado se traduzca en desarrollo social, científico y tecnológico para México. La nación deposita recursos y confianza en este proceso; nuestra responsabilidad es honrar ese compromiso con dedicación y excelencia.
Jorge Luis García Alcaraz
Ingeniero Industrial y Maestro en Ciencias de la Ingeniería Industrial conDoctorados en Ingeniería Industrial; Ingeniería, Diseño de Producto y Procesos Industriales; Ciencias y Tecnología Industrial; Ingeniería Mecánica por la Universidad de Zaragoza (España) y Postdoctorado en Procesos de Manufactura.
Pertenece al Sistema Nacional de Investigadores en el Nivel III e investiga el modelado de sistemas de producción. Recibió el premio estatal de Ciencia, Tecnología e Innovación 2015.
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