Creía haberlo visto todo, pero no, aún hay mucho por descubrir en este mundo poscovidiano.
Primero.
No acostumbro ver programas de televisión de contenido banal o intrascendente. Es un submundo que no visito, pero sé que existe, para solaz de la perrada que se divierte con el morbo que le aflora.
Sin embargo, en el cambio de canales de la televisión abierta, me detuve en esta entrevista, y me llené de asombro ante la frescura de una chica baladí llamada Manelik González.
Hermosa, pero llena de sinvergonzonería. (Diría mi abuelita que seguramente en gloria está), entrevistada por el famoso periodista de escándalos entre los artistas, Gustavo Adolfo.
Durante media hora, descubrimos que la señora entrevistada ha ganado mucho dinero a través de un programa de televisión para adultos llamado ACAPULCO SHORE.
Un Reality Show en el que el reventón en los antros, y el sexo entre los participantes de la “casa”, son la carnita principal del espectáculo por tv y redes sociales.
Anticipo a ustedes que me considero open mind, y que no me sorprende que en esta era donde las muchachitas desde los 18 años buscan un protector al que le llaman sugar daddy, y le proporcionan sexo a cambio de regalos, viajes, o dinero semanal, lo pregonen sin empacho. Y lo que es piorrr, con el consentimiento de sus padres.
Eso, es ya parte de la convivencia social poscovidiana.
Lo que me dejó asombrado, fue la manera tan atrevida y descocada, con la que Manelik cuenta el desarrollo de su “carrera artística”, que comienza en los antros para caballeros como carnita de placer para los clientes; y se va colando, hasta conseguir ser parte del elenco de tan singular espectáculo.
En mis tiempos juveniles, finales de los 60’s, la escandalosa publicación de La Tigresa, Irma Serrano, conmocionó a la sociedad bajo el título de “A Calzón Amarrado”. En la que sin decirlo abiertamente, sugería haberse acostado con encumbrados políticos del momento, incluyendo al presidente Gustavo Díaz Ordaz, quien al parecer la colmaban de fastuosos obsequios como mansiones, joyas, autos y dinero, por el placer de yacer con ella en la cama.
Todo un escándalo.
Lo insólito hoy, es que la versión poscovidiana de ese tipo de mujeres es tan futil, que pasa como si nada en televisión abierta.
Su vida, personal no se juzga. No soy moralista, ni me invade la hipocresía. De hecho, soy promotor del entrepiernur, y lo sabe mi auditorio de redes sociales.
Pero cuando la intimidad deja de serlo, y se difunde sin empacho la promiscuidad, es pasar a otro nivel de la osadía.
Segundo.
Quién imaginaría el grado de odio, mal querencia y antipatía que alguien pueda generar en un grupo o sector, como el causado por Elba Esther Gordillo, reconocida entre los profesores del SNTE, como “La Maestra”, o entre sus detractores de la CNTE, como, “La mamá de Chucky”, el muñeco asesino.
El pasado 12 de febrero, maestros de la Sección XII de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE) irrumpieron en el lugar donde se realizaba la boda de la exlideresa sindical, con su abogado de 35 años, Luis Antonio Lagunas Gutiérrez, en Oaxaca y lo destrozaron todo.
Los manifestantes forman parte de uno de los grupos sectoriales de la sección 22 de la Coordinadora Nacional de Trabajadores de la Educación (CNTE), y llegaron a romperlo todo.
El móvil de los vándalos aún no es claro, pero como dije al principio, pensé que lo había visto todo.
¿Qué nos resta por hacer? Disfrutar los Ingeniosos memes.
Abogado. Analista Político. Amante de las letras.
CARTAPACIO, su sello distintivo, es un concepto de comunicación que nace en 1986 en televisión hasta expanderse a formatos como revista, programa de radio y redes sociales.
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