… el poder del México mayoritario unido.
“Las mayorías no odian, odian las minorías.
Porque conquistar derechos provoca alegría, mientras que perder privilegios provoca rencor y odio.”
Para todos, absolutamente todos, nos debe de haber quedado más que en claro quién es el que tiene el apoyo y representa el poder del pueblo de México, el supremo mandante en este democrático país después de ver la súper mega concentración de ciudadanos libres y felices efectuada el pasado domingo en la ciudad de México, la marcha del 27N, la marcha que se hizo fiesta.
Alrededor de 1.2 millones de ciudadanos respondieron a la convocatoria de la 4T, Morena y el presidente, todos y el presidente caminando con la gente y tardaron más de 6 horas en llegar a un zócalo casi lleno, desde antes de que llegaran las multitudes de ciudadanos que aún estaban partiendo del Angel , o sea los contingentes que venían acompañando al presidente y que estaban en todas las calles laterales y avenidas centrales con sus laterales, y las vías de la ruta trazada, todas estaban abarrotadas de ciudadanos caminando rumbo a la cita con la democracia convocada por el presidente.
El dato reportado por las autoridades de la CDMX indican que fue una concentración multitudinaria de más de 1.2 millones de personas, y si, es posible ese número porque desde el Angel y calles laterales estaba abarrotada de personas y el zócalo ya casi lleno 6 horas antes de iniciar el discurso presidencial, en su momento se veían los ríos de gente entrando al zócalo por las laterales y ya sin poder lograrlo, no cabía ni un alfiler, las entradas al momento del discurso de AMLO estaban atiborradas de ciudadanos y por varias cuadras del centro… y seguían llegado.
La cifra ofrecida por el Gobierno de la Ciudad de México duplicó y más a la registrada en la manifestación realizada en “defensa” del INE que los convocantes opositores minoritarios habían fijado en 640 mil según Felipe Calderón, mas sin embargo, el muestreo fotográfico de un zócalo lleno y las calles desde el Ángel a reventar podremos decir que pudieron haber sido muchísimos más de 1.2 millones de ciudadanos los que acudieron a acompañar al presidente López Obrador.
Por supuesto una mayoría triunfadora y aplastante, contundente y organizada.
En democracia ganan las mayorías y, como resultado de la MARCHA DEL ODIO, los opositores minoritarios declaraba que el mandato del pueblo manifestante era claro, pues bien, hoy esta súper más que claro que el mandato del pueblo mayoritario debería ser MANDANTE para todos, principalmente a diputados y senadores opositores en donde la obediencia va en el sentido de la aprobación de la REFORMA CONSTITUCIONAL electoral.
Y siguiendo sus propias declaraciones no hay vuelta de hoja, tendrán que obedecer el mandato, así lo declaraban ellos mismos (los opositores) al concluir su MARCHA DEL ODIO que respetaban el mandato popular derivado del resultado de la concentración por su convocatoria, ése día el domingo 13 de Noviembre (13N), se ufanaban de ello y se declaraban respetuosos, ahora tendrán que demostrarlo al pueblo de México.
Para que exista coherencia en dichos y declaraciones los opositores minoritarios deberán actuar en consecuencia OBEDECIENDO el mandato popular, ¿lo harán?
Hay que entender que la movilización para lograr ese volumen de ciudadanos por supuesto que representa un reto y un conocimiento muy grande de logística y transporte y no se diga de movilización de las estructuras políticas de Morena como partido y de los liderazgos, así como los simpatizantes naturales que tiene el presidente ya que de todas partes del país llegaron para participar y acompañar al presidente López Obrador.
Los vuelos de llegada, y salida por la tarde, estaban abarrotados y sin posibilidades de cupo desde y hacia los principales aeropuertos del país, Ciudad Juárez uno de ellos.
En el transporte terrestre fue impresionante la respuesta de los ciudadanos que viajaron por cuenta propia, no se diga de los mexicanos en el exterior que fueron muchísimos los que se concentraron en la glorieta del El Ángel entrada la noche del 26 de Noviembre, sumados a la concentración de Youtubers.
La denostación de los opositores minoritarios al llamar “acarreados” al millón doscientos mil ciudadanos que participaron en la marcha del 27N no es más que el resultado de no querer aceptar que son minoría y que no pueden entender los formatos de trabajo de la 4T y sus seguidores que utilizaron todos los medios a su alcance para acudir a la cita con el presidente.
Un camión ida y vuelta a la CDMX, desde las mediaciones y cercanías, cuesta aproximadamente 25,000 con capacidad de 44 pasajeros lo que le representó a cada viajero el gasto de $568.00 ida y vuelta, mas sin embargo, era inmensa la gran mayoría de ciudadanos residentes de la CDMX y sus alrededores.
Vivimos en un mundo mecanizado para todos y los opositores minoritarios creyeron que la mayoría de los mexicanos aún nos conducimos en burros y mulas para nuestros traslados y es por ello que se quedaron asombrados, y espantados, de la enorme cantidad de camiones estacionados esperando a los ciudadanos regresarlos a sus orígenes, eso no lo entienden porque han estado acostumbrados a que TODO SE LOS DABAN, TODO LES PAGABAN, TODO SE ROBABAN y creen que en la mayoría así deben funcionar las cosas y no, y bien lo dijo el presidente López Obrador, del erario público NI UN CINCO se tocará… y les cuesta mucho trabajo entenderlo, sobre a todo al vividor del erario, y subsidiado por el extranjero, Claudio X González, la cabeza y pastor de los opositores minoritarios y sus partidos en vías de extinción.
Les queda muchísimo por asimilar y aprender a los opositores minoritarios de esta MEGA SUPER FIESTA DEL 27N.
El mensaje es claro, la histórica marcha marca un antes y un después y deja clarificado quien tiene el liderazgo y el apoyo absoluto del país y, como resultado de ello, lo tolerante que ha sido hacia los opositores minoritarios y sus berrinches de niños mal educados a quienes les quitaron la paleta.
Habrá que recordar que los opositores minoritarios rehuyeron llegar al zócalo en su marcha del 13N porque de haberlo hecho la gráfica y la radiografía hubiera sido mucho más exacta de la dimensión de la respuesta a su convocatoria, tuvieron miedo el hacerlo porque sabían que de haber llegado al zócalo su estrategia mediática se vendría abajo totalmente.
“No debe ser fácil” ver como ayer, domingo 27 de noviembre, fue el día en que la izquierda se graduó como una fuerza organizada y consolidada. Quien quiera cerrar los ojos lo hará bajo su propio riesgo, escribió el periodista Alejandro Pérez Varela.
Y para quienes critican al presidente por su edad, y su estado de salud, pues sinceramente se habrán tenido que comer sus “buenos” deseos y tragarse sus palabras porque les dio una muestra enorme de vitalidad, condición y liderazgo… a sus 69 años y con ese vigor, dinamismo, entrega y perseverancia ya quisieran los opositores minoritarios, cualquiera de ellos, cinco pesos de esa entereza demostrada.
Egresado de la Facultad de Comercio y Administración por la Universidad Autónoma de Tamaulipas. Su desarrollo profesional ha sido en empresas privadas en posiciones directivas donde a logrado acumular 42 años de servicio.
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