Claro que no fue una reunión de cuates la que se dio entre Javier Corral Jurado y Ricardo Anaya, los dos panistas con peso específico en el partido, por supuesto que no fue para tomarse el cafecito y charlar de las cosas bellas de la vida, claro que no fue así esa privada reunión, ha sido la reunión política de mayor trascendencia para el futuro del gobernador Corral.
Ricardo Anaya no es nadie para poder llegar a Palacio de Gobierno de Chihuahua y tener una entrevista privada con el gobernador, al contrario es un pasivo del PAN que más que beneficios le acarrea perjuicios al Gobernador políticamente hablando y, el gobernador, es un ente político en actividad que debió cuidar las formas y los fondos ante una reunión con ese perjudicial personaje, una cosa es que Corral haya aplaudido el retorno de Anaya a la política y otra muy distinta es Anaya hoy en la posición de Javier Corral ante los acontecimientos con Maru Campos, o no cuidaron las formas o Corral lo quiso exhibir.
Ricardo Anaya fue contundente con Javier Corral, le hablo al militante sin importarle que es el Gobernador, Corral aguantó la embestida.
Se lo hicieron saber a Javier Corral, o da marcha para atrás en el asunto de Maru Campos sin importar la posible culpabilidad o será expulsado del partido, así de seco y duro fue Ricardo Anaya según me dijo la fuente que estuvo en la antesala de la reunión y no solo eso, le advirtieron al Gobernador que las posibilidades de triunfo eran altas y de llegar a la gubernatura el asunto de Duarte sería chiquito para la que le espera a Corral, muy serio Corral lo escuchaba, le ofrecían impunidad.
Se habló de la estrategia que debería llevarse a cabo para dar por terminado el asunto de Maru Campos, Corral dio evasivas y nunca asentó por aceptado el “paquete” que traía Ricardo Anaya.
Ricardo Anaya no tiene ninguna representación política ni dentro del partido ni en ningun lado, es un militante más que fue el mensajero del establishment Panista.
Dicho encargo debió de haber sido llevado por Marko Cortez que es el presidente nacional del Partido pero no tiene la fuerza “política” que pudiera tener Anaya, según ellos, no quisieron que fuera el gato, mandaron al “patrón”.
En los próximos tiempos estaremos viendo la conformación de la verdad de esta historia, el comportamiento del proceso que le sigue el Gobierno del Estado a Maru Campos nos va a dar la confirmación de lo que ahí se habló, y de la decisión que tomo el Gobernador Corral.
El lugar donde fue la reunión privada lleva mensaje, “estás hablando con el gobernador” porque sí Corral no hubiera querido exhibir a Ricardo Anaya la reunión privada hubiera sido mucho más privada, a los reporteros se les corrió el rumor de que Anaya iba a ver al Gobernador, lo esperaban.
No se necesita tener bolita de cristal para entender la trama, y el silencio en torno a ello, porque no fue silente la reunión, fue pública.
Mantenga usted lector el olfato en torno a cómo se desarrolla el juicio de imputación a Maru Campos, al panismo no le importa que técnicamente hoy sea una delincuente su candidata a gobernador.
Al precio que sea buscan que no llegue la imputación, cada vez confirman mas y mas su culpabilidad, hoy buscan los medios para evitar la imputación y el único que puede hacerlo es el Gobierno del Estado al costo político del descrédito.
Si lo logran, golpearan más, pero mucho más a su candidata que ya ha llegado al tope de su curva de aceptación, va en caída ya, y eso que todavía no inicia la campaña.
De Javier Corral depende si hay #justiciaparachihuahua en el caso de Maru Campos, o se faja los pantalones y nos demuestra que su lucha contra el saqueo del estado fue en serio o nos demuestra que se le cayeron los pantalones porque lo agarraron de nobles partes.
Le llegó la hora de decidirse a Javier Corral y ver de qué está hecho.
En un momento se escribió: “El protagonismo de Javier Corral hizo que varios grupos de poder al interior de Acción Nacional consideran que el aguerrido gobernador sea actualmente considerado el aspirante más serio para liderar la oposición contra López Obrador. Las redes de relaciones políticas y empresariales del chihuahuense también lo colocan como un personaje atractivo para PRI, PRD y Movimiento Ciudadano, lo cual eleva sus puntos considerablemente ante una oposición hoy totalmente sin brújula ni liderazgo”, Anaya viene a ser un estorbo para los planes de Corral.
Todo lo puede mandar al basurero Javier Corral con una mala decisión en el asunto de Maru Campos, retroceder y rajarse lo debilita al máximo, el seguir y lograr imputarse lo pone en una posición envidiable porque habrá demostrado que es coherente con #justiciaparachihuahua que todos los Chihuahuenses apoyaron y apoyan, si Corral quiere asumir ese liderazgo no estaría en posición de retractarse por acuerdo con nadie, si acuerda con Ricardo Anaya, Anaya lo traiciona y Corral lo sabe mas que bien.
Chihuahua no merece una delincuente, ni como candidata.
Raúl Sabido
Egresado de la Facultad de Comercio y Administración por la Universidad Autónoma de Tamaulipas. Su desarrollo profesional ha sido en empresas privadas en posiciones directivas donde a logrado acumular 42 años de servicio.
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