Estimados lectores, en este día 25 de noviembre, conviene resaltar la importancia que tiene la eliminación de la violencia en contra de la mujer. En la actualidad, 1 de cada 3 mujeres ha sufrido algún tipo de maltrato en su vida según la Organización de las Naciones Unidas.
Históricamente, la violencia de género ha sufrido cambios positivos, sin embargo falta mucho por hacer. Según el INEGI, nuestro país ocupa el 3er lugar en Hispanoamérica en trata de mujeres, cifras realmente alarmantes, pues se habla de 3.6 millones de personas en fase ya de vulnerabilidad.
Las acciones que deben emprenderse para contrarrestar esta situación van desde los espacios laborales, las políticas gubernamentales, las costumbres, etc., pero, sin duda alguna, el espacio mas poderoso siempre será el seno familiar.
En efecto, el papel de la familia en la estructura de principios y valores de las personas, sobre todo de los infantes, es determinante en la formación de una ideología coherente en cuanto a equidad de género se refiere.
Desde luego que la misma mujer debe iniciar su propia autoconciencia sobre la necesidad de defensa y protección. La denuncia es una acción que no hay que dejar de lado, sino promoverla, pues la ONU cataloga que en México menos del 40% de las mujeres que han sufrido algún tipo de violencia buscan algún tipo de ayuda.
Importante saber también que la violencia puede darse de diferentes ámbitos, por ejemplo violencia económica, psicológica, emocional, física y sexual, pero uno de los tipos de violencia muy sentido, sobre todo en nuestra localidad, es el feminicidio.
Unámonos en una sola voz para contribuir desde nuestro propio espacio ciudadano, laboral y social, para que los índices tan altos de violencia contra la mujer vayan en detrimento.
“Portemos el color naranja como distintivo internacional en contra de la violencia contra la mujer”.
Profesor.
