El Instituto Nacional Electoral es el organismo público autónomo encargado de organizar las elecciones federales, es decir la elección de la Presidencia de la República, diputadas y diputados, senadoras y senadores que integran el Congreso de la Unión; de igual forma organiza en coordinación con los organismos electorales de las entidades federativas las elecciones locales en los estados de la república y de Ciudad de México. Es un árbitro independiente, autónomo, imparcial y profesional, pero se ha vuelto el enemigo más fuerte de este gobierno federal.
En el pasado candidatos o partidos perdedores de alguna elección, culpaban al INE por diferentes cuestiones, mas ahora resulta paradójico que uno de los actores principales que participó activamente en la aprobación de las reglas del proceso electoral se queje hoy de su cumplimiento, desacreditándolo e intimidándolo. Se les olvida que ante la opinión pública fue el propio INE, en su calidad de árbitro quien organizó las elecciones presidenciales de 2018 en las que se reconoció legalmente el triunfo de Andrés Manuel López obrador, morena y sus aliados.
El INE en diferentes ocasiones ha dado muestra de su parcialidad, sancionado fuertemente a todos los partidos por distintas faltas y como en muchos otros casos a este gobierno, le incomodan las normas y las leyes que sostienen la democracia en México, por eso es por lo que el INE hoy se ha vuelto su principal enemigo. La fortaleza del INE radica en su historia, pero sobre todo su experiencia acumulada y en el desempeño cotidiano.
El problema de tratar de doblegar al Instituto es que, de ser eliminado, quién llevará a cabo, con imparcialidad e independencia todas las actividades que día a día realizan los miembros del servicio profesional electoral nacional y sus trabajadores. El verdadero problema radica en que no se quiere fortalecer la democracia sino por el contrario retornar a un sistema modo para que un solo partido se haga del poder y obviamente ese partido sería MORENA. Lo que está en juego es la libertad de los mexicanos.
La defensa del INE es ya un parteaguas de la muestra del movimiento de la sociedad civil organizada en México, no sólo los partidos de oposición sino que los ciudadanos libres se están manifestando, por eso se está convocando a una marcha nacional para salir a defender al INE este 13 de noviembre en todas las entidades federativas, siendo en este momento tendencia en redes sociales los hashtag #elINEnosetoca #defendamosalINE donde queda evidenciado que somos la mayoría los que realmente defendemos la verdadera democracia.
Ayer miércoles el Presidente en su espectáculo mañanero, despotricó contra los asistentes de la marcha en defensa del INE convocada por organizaciones de la sociedad civil a la que se le suman partidos de oposición llamándonos hipócritas, clasistas, racistas, cretinos corruptasos, agregado a frase “Que se vayan a engañar más lejos”. Hay que recordar que el INE nace en 1997, bajo una mesa de reforma política incluyente promovida por el PRI.
Ni clasistas, ni racistas, ni fifís mucho menos hipócritas; somos ciudadanos que defendemos la libertad, que defendemos la democracia, Democracia que el mismo López Obrador colaboró para lograrla. Valen más sus calificativos hacia un ciudadano qué opina diferente, aplica el que si no están conmigo están en mi contra como siempre y como en todo. Esta reforma plantea un acto unilateral; eso en una democracia es autoritarismo.
El instituto nacional electoral fue la solución ciudadana al autoritarismo de ayer y es el escudo ciudadano contra todo nuevo autoritarismo.
Criminóloga y Empresaria Juarense
Actualmente Presidenta del Organismo Nacional de Mujeres Priistas en el Estado de Chihuahua (ONMPRI) y Estudiante de Administración de Empresas en la Universidad de la Rioja España.
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