El activista responsabiliza a la Coespris de la acumulación de los 383 cadáveres en el incinerador de Granjas Polo Gamboa, y considera que las autoridades protegen a funcionarios estatales que no hicieron su “chamba”.
Ciudad Juárez, Chih (ADN/Arturo Hernández) .– José Luis Castillo, quien desde el 2009 busca a su hija Esmeralda Castillo, responsabilizó al Gobierno del Estado de la acumulación de 383 cadáveres en el crematorio Plenitud, ubicado en Granjas Polo Gamboa, hechos ocurridos el pasado 27 de junio.
El activista cuestionó la omisión en la que incurrió la Comisión Estatal para la Protección contra Riesgos Sanitarios (Coespris), al no darle seguimiento a la denuncia interpuesta en el 2020 por los vecinos del lugar por los olores fétidos provocados por la acumulación de restos humanos.
Recordó que ese año, el crematorio fue sancionado por este motivo, y que, en su momento, los responsables del establecimiento argumentaron que habían sido rebasados por la carga de trabajo, pero que, tras el pago de la sanción el crematorio retomó operaciones casi de inmediato.
“No hay que ser muy inteligente que aquí hay un acto de corrupción”, planteó.
“¿Cómo nos explicamos que se les haya permitido seguir laborando sin ninguna inspección al grado de llegar a acumular tanto cadáver?”, cuestionó.
Expuso que los hechos indican que en esos cinco años no hubo ninguna revisión de la Coespris, y que si la hubo, algo extraño sucedió porque no se sancionó a los propietarios del crematorio por estas irregularidades, dejando abierta la posibilidad de la entrega de sobornos.
Se fue directo al Gobierno del Estado, al indicar que a través de sus dependencias debe de estar al pendiente de estas, y otras situaciones, y que ahora, a través de la Fiscalía se ha generado una cortina de humo para evadir su responsabilidad y proteger a los funcionarios involucrados.
Sobre la posibilidad de que entre los 383 cadáveres se encuentren mujeres desaparecidas, como lo mencionaron algunas personas, consideró remota la probabilidad, ya que, lo dijo, los restos ubicados en el lugar fueron documentados por las funerarias al subcontratar el servicio de cremación.
“Esta posibilidad la consideró remota, pero lo que si sería posible es que entre los cuerpos haya personas levantadas, o desaparecidas en los tiempos recientes, pero eso lo tienen que investigar las autoridades”, mencionó.
De retirada manifestó que a los deudos cadáveres del crematorio se les esta revictimizando al dejarlos por largas horas en la fiscalía para ser atendidos.
“Ahí los tienen por largas horas para ser atendidos, y eso también es violencia”, concluyó, no sin antes pedirle a las autoridades eficiencia en el trato a las familias perjudicadas.
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