“En ambos casos las repercusiones perjudicarán el poder adquisitivo de los ciudadanos, quienes serán al final los que absorban las medidas financieras establecidas por las autoridades a través del incremento en los impuestos”: David Espinoza, economista.
Ciudad Juárez, Chih (ADN / Arturo Hernández) – De acuerdo al economista David Espinoza, será el consumidor quien al final cubrirá los incrementos al impuesto sobre nómina y al salario mínimo, lo que provocará un deterioro al poder adquisitivo, sobre todo en el sector más desprotegido de la ciudad.
La propuesta del Gobierno del Estado es que para el 2022 el ISN se actualice de 3% al 4.5% y que baje gradualmente 0.5% de manera anual, es decir que en tres años vuelva a quedar en 3%, mientras que el presidente Andrés Manuel López Obrador anunció un aumento salarial en la frontera del 22%, para alcanzar los 264 pesos diarios, lo que, a juicio de David Espinoza, más que venir a aliviar la situación de la clase trabajadora, vendrá a perjudicarles al generarse mayor inflación.
“En ambos casos la repercusión caerá en el poder adquisitivo de los ciudadanos, quienes serán al final los que absorban las medidas financieras establecidas por las autoridades a través del incremento en los impuestos”, señaló.
“Se pudiera pensar que el aumento al salario mínimo vendrá a darle mayor poder adquisitivo a la gente, sin embargo, en términos reales no es así, porque por obvias razones, los empresarios al tener mayores gastos salariales y de servicios, como pagos al IMSS y del Infonavit, entre otros, también se verán en la necesidad de subir los precios de sus productos, es decir, que, en la práctica, más que ayudar a la gente, ambas medidas vendrán a perjudicarles”, agregó.
Indico que, ante tales circunstancias el crecimiento de económico de Juárez se verá frenado aún más, porque la inflación se disparará con el deterioro natural al bolsillo de los más desprotegidos, sin dejar de lado, que a causa de la pandemia las cadenas de producción se han visto interrumpidas.
Mencionó que este fenómeno financiero no es propio de nuestra frontera, sino que, por el contrario, es un problema que se vive a nivel mundial pero que tiene mayores repercusiones en sitios que, como Ciudad Juárez, están sujetos a los vaivenes económicos internacionales al depender del sector industrial.
Consideró que la pandemia es el principal elemento que ha venido a trastocar la vida social, y por consecuencia las economías de los países, y que obliga a los gobernantes a buscar alternativas, sin embargo, lamentó que en la mayoría de las ocasiones las estrategias de financiamiento caigan en la espalda de la gente, quien tiene que soportar los fenómenos como el que vivimos en estos momentos a causa de la pandemia por el Covid-19.
“En los fenómenos macroeconómicos la oferta y la demanda son determinantes, y cuando uno de los factores falla, es decir, cuando no hay los suficientes artículos en el mercado a causa de la ruptura de las cadenas de producción, se viene un desbalance y con ello el aumento de los precios que deriva en inflación”, indicó.
Dijo que, ante la situación, las autoridades deben buscar alternativas de desarrollo, y propuso tres medidas, una de ellas es la promoción del turismo, además de la mejora urbana, e hizo énfasis en la seguridad, medidas que, según lo dijo, pudieran ser importantes en la reactivación económica de la ciudad, y con ello, aliviar la carga de la ciudadanía.
“La solución al desarrollo de Juárez esta en manos de las autoridades, solo es cuestión de tener la voluntad de hacerlo”.
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