Detectan red de contrabando con presunta participación de militares; autoridades federales lideran la investigación.
Ciudad Juárez, Chih. (ADN/Arturo Hernández) – El titular de la Secretaría de Seguridad Pública del Estado (SSPE), Gilberto Loya Chávez, confirmó la operación de una red de huachicol fiscal a través de la aduana de Ciudad Juárez, y reconoció que Chihuahua enfrenta dos modalidades de este delito: el contrabando de hidrocarburos por la frontera y la extracción ilegal directamente de ductos de Pemex en distintas regiones del estado.
La declaración se da luego de que, el pasado viernes, se revelara que la Fiscalía General de la República (FGR) lleva a cabo una investigación sobre una red de contrabando en la que estarían involucrados altos mandos militares, operando desde el año 2021 en aduanas clave como la de Ciudad Juárez y la de Palomas.
Uno de los señalados es el coronel retirado Octavio Othón López Pérez, quien hasta el pasado 1 de noviembre fungía como administrador de la aduana en esta ciudad. Su remoción se habría dado tras el decomiso de al menos nueve pipas de la empresa Windstar, las cuales fueron interceptadas en un doble retén implementado por la FGR y la Secretaría de Seguridad y Protección Ciudadana, ante sospechas de corrupción en el manejo de combustibles importados.
López Pérez ha sido vinculado con René Díaz, alias “La Rana”, presunto responsable de la distribución del hidrocarburo ilegal no solo en Chihuahua, sino también en otras entidades del país, según fuentes ministeriales.
En conferencia, Gilberto Loya explicó que la mayor parte de las investigaciones y operativos están a cargo de las autoridades federales, pero reiteró que la SSPE mantiene coordinación permanente, particularmente a través de la Mesa Estatal de Seguridad.
“Cada semana se reportan tomas clandestinas selladas en diferentes puntos del estado”, precisó el secretario. Añadió que aunque Chihuahua no se encuentra entre las entidades con mayor incidencia de extracción ilegal de hidrocarburos, se mantienen los trabajos de prevención y detección, especialmente en zonas donde ya se han identificado actividades ilícitas, como Sueco, Robinson y Escalón.
El llamado “huachicol fiscal” se refiere al ingreso irregular de combustible al país por medio de prácticas como el subregistro en aduanas, uso de documentos apócrifos o evasión deliberada de impuestos. A diferencia del huachicol tradicional —extraído directamente de tomas clandestinas en ductos— este tipo de contrabando suele operar con mayor grado de sofisticación y presunto respaldo institucional.
Las investigaciones continúan bajo el liderazgo de la FGR, y se espera que en los próximos días se determine si habrá más detenciones o vinculaciones con funcionarios públicos, tanto civiles como militares, en esta red que ya ha sido catalogada como de alto perfil.
Loya Chávez reiteró el compromiso del Gobierno del Estado para seguir colaborando con instancias federales, y reafirmó que Chihuahua no bajará la guardia frente al crimen organizado, ni en las zonas fronterizas ni en los corredores de distribución interna.
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