De acuerdo con un boletín del Gabinete de Seguridad, las autoridades mexicanas lograron una significativa incautación de cocaína, que estaba oculta en 180 bultos dentro de un semisumergible equipado con cuatro motores fuera de borda. Esta operación se considera un éxito en la lucha contra el narcotráfico, ya que se estima que se evitaron más de siete millones de dosis de esta droga en las calles.
Ciudad de México (ADN/Staff) .- El funcionario mexicano, en su comunicado, destacó la importancia de esta acción en el contexto de la seguridad pública y la salud de la población. La cocaína, uno de los narcóticos más consumidos, representa un grave riesgo para la sociedad, y la intervención de las autoridades es crucial para mitigar su impacto.
Este tipo de operativos se realizan de manera constante para desarticular las redes de tráfico de drogas.
Además, el secretario de Seguridad, Omar García Harfuch, reconoció la labor de la Secretaría de Marina en la protección de los mares de México.
La colaboración entre diferentes cuerpos de seguridad se ha vuelto fundamental para enfrentar el crimen organizado, especialmente en zonas costeras donde el tráfico de drogas es más frecuente. La Marina ha desempeñado un papel clave en la vigilancia y control de estas áreas.
Recientemente, en la misma región donde se llevó a cabo la última incautación, las autoridades también aseguraron 37 bultos que contenían paquetes de cocaína.
En esta ocasión, se recuperaron un total de 1.112 kilogramos de la sustancia, lo que representa un golpe significativo para los grupos delictivos.
El valor económico de esta incautación se estima en poco más de 263 millones de pesos, equivalente a casi 13.8 millones de dólares.
Las autoridades han reiterado su compromiso de continuar con estas operaciones para desmantelar las estructuras del narcotráfico en el país. La coordinación entre las diferentes instituciones de seguridad es esencial para lograr resultados contundentes.
La lucha contra el narcotráfico no solo se centra en la detención de cargamentos, sino también en la desarticulación de las organizaciones criminales que operan en el territorio nacional.
La estrategia de seguridad implementada por el gobierno mexicano busca no solo la incautación de drogas, sino también la prevención del consumo y la rehabilitación de adictos.
A través de programas de atención y apoyo, se espera reducir el número de personas afectadas por el consumo de sustancias ilegales y, al mismo tiempo, debilitar la economía de los grupos delictivos que se benefician de este mercado.
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