El calificativo ‘viejerio’, es una expresión del inefable Diego Fernández de Cevallos, quien es reconocido nacionalmente por su cinismo y misoginia.
Hoy lo tomo prestado para ponerle un poco de ruido al chicharrón al ilustrar esta columna.
Dicen, los que están más enterados, que la contienda electoral en Ciudad Juárez, podría darse entre mujeres.
Es posible que por primera ocasión se enfrenten puras mujeres para la alcaldía, entre los partidos más relevantes.
Excepto en Movimiento Ciudadano, cuyo adalid es ya el güerito Martínez.
Afilan sus machetes las siguientes participantes.
PAN
Si los panistas no logran despojarse de la abominación de aliarse con el PRI y el PRD, postularían a Clara Torres.
¿Por qué?
Porque no tienen cuadros competitivos femeninos.
Lo vimos ya con el fracaso terrible el día que María Antonieta Pérez hizo el ridículo electoral al perder casi 3 a 1 contra Enrique Serrano.
Hoy, además de Clara, el PAN cuenta con dos activos femeninos que podrían dar la batalla, pero sin mucho arrastre electoral dado el divisionismo azul.
Se trata de las ex diputadas, Maribel Hernández y Daniela Álvarez.
Clara Torres tiene muchas tablas y si Maru Campos fuese la candidata a la gubernatura, seguramente tendría todo su apoyo.
Aunque por las ligas fraternales y de trabajo, vendría mejor Daniela Álvarez.
A Maribel la tiene bloqueada la vicegobernadora, Leticia Corral, y difícilmente cruzaría la malla ciclónica electrificada que le impone la que manda en palacio. Quizás Maribel, por su tozuda personalidad, alcance candidatura a diputada, y repita campaña por el 8, donde tiene buen capital electoral.
Hay otros dos cuadros interesantes que no aprovechan los pitufos; Karla Gutiérrez y Laura Marín. Pero como antes dije, el PAN no las hace competitivas en campo abierto.
Por el PRI, ya va Adriana La güera, Fuentes. Pero por más que se esfuerza en levantar la mano y hacer video-entrevistas sosas por instagram, no causa mucho interés.
Los priístas no la juntan en los encuentros con los perredistas para hacer la alianza. Ni a ella ni al Teto.
Podría anotar a Lilia Merodio, pero ella aspira a la candidatura por la gubernatura, peleándosela a Omar Bazán.
Por MORENA, va mano Esther Mejía, las encuestas la posicionan como ganadora en la elección. Primero porque la intención electoral aún la tiene Morena, con todo y la división que guarda.
Esther es institucional. Aunque ella hubiera preferido como candidato a Rafael Espino, seguramente pondrá a disposición de LOERA, todos sus activos en las colonias donde la aclama la gente.
En segundo lugar, si la contienda fuera entre mujeres, aparece la sindica, Leticia Ortega, quien ha desperdiciado el cargo para aspirar a algo mejor.
Se ha retraído a cumplir más con sus actividades académicas que a su obligación política. Esto la deja prácticamente en la lona. Sin activos en el terreno estructural, y solamente con la venia de su gran amigo, Juan Carlos Loera, ahora candidato a la gubernatura.
Quizás el demonio meta mano y el candidato cometa el gran error de imponer a la señora Ortega sobre la diputada Mejía solo por joder.
El ‘viejerio’ en la contienda para el 21 no es muy sólido. Poco material femenino de peso en los partidos políticos.
Vamos por las palomitas. El escenario para el arranque del año queda en stand bye.
Espero que la PANDEMIA no arruine por completo el espíritu navideño. Cuídense mucho y sólo festejen lo indispensable. Guardense temprano.
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