El exfutbolista Javier “Chicharito” Hernández, máximo goleador histórico de la Selección de México, ha generado controversia en el país debido a comentarios recientes que han sido calificados como sexistas y discriminatorios.
Ciudad de México (ADN/Staff) – A pesar de su estatus como figura pública y su regreso a México con la esperanza de ser un ídolo, sus declaraciones han desatado una ola de críticas, incluso desde la esfera política.
Hernández, quien actualmente juega en la liga mexicana y es uno de los futbolistas mejor pagados con un salario de 2.3 millones de dólares por temporada, ha estado más enfocado en crear contenido motivacional y en colaborar con influencers como Diego Dreyfus.
Sin embargo, su enfoque ha sido cuestionado, especialmente por su desempeño en el campo, que ha sido objeto de críticas por parte de aficionados y analistas deportivos.
El punto de inflexión llegó cuando el jugador publicó un video en el que expresó opiniones que fueron interpretadas como un ataque a la feminidad.
En sus declaraciones, Chicharito mencionó que “las mujeres están fracasando” y que “necesitan aprender a aceptar y honrar la masculinidad”.
Estas afirmaciones fueron rápidamente condenadas en redes sociales y medios de comunicación, lo que llevó a un debate sobre la responsabilidad de las figuras públicas en la promoción de valores igualitarios.
La presidenta de la Ciudad de México, Claudia Sheinbaum, no tardó en reaccionar ante los comentarios del futbolista.
En una declaración pública, lamentó que un personaje de su relevancia hiciera afirmaciones de corte “machista” y subrayó la importancia de la igualdad de género.
“Las mujeres podemos ser lo que queramos y es una relación de igualdad”, enfatizó Sheinbaum, resaltando la necesidad de que figuras como Chicharito sean más conscientes de su influencia.
La Federación Mexicana de Fútbol también se pronunció al respecto, señalando que las palabras del jugador promovían estereotipos sexistas y constituían violencia mediática.
Como consecuencia, se impuso una multa económica a Hernández, aunque el monto específico no ha sido revelado.
Este tipo de sanciones refleja un esfuerzo por parte de las autoridades deportivas para erradicar comportamientos que perpetúan la desigualdad de género.
Ante la creciente presión social y mediática, Chicharito emitió una disculpa pública en la que expresó su arrepentimiento por cualquier confusión o malestar que sus palabras pudieran haber causado.
Afirmó que su intención nunca fue herir ni dividir, y se comprometió a reflexionar sobre sus declaraciones y a mejorar su sensibilidad en temas delicados.
Este episodio pone de relieve la importancia de la responsabilidad social de los deportistas y su papel en la promoción de una cultura de respeto e igualdad.

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